Rigotryl, un estado emocional

Histriónico, desfachatado, querible… Y sí, vamos cerrando el año con algunas cosas que nos han quedado pendientes, y más vale tarde que nunca.

Pablo Ruffa presentó un unipersonal con galería de personajes que el mismo compone, escribe e interpreta. Sí, el solito en escena.

Luego de una “rara” jugada de la sala (que le canceló la última función en una falta de códigos totales hacia el actor, el producto y el arte en sí, por alquilar el espacio para otro evento) hizo funciones donde la gente rió con sus caracterizaciones.

Un nabo total que nos provoca carcajadas con su postura, sus palabras, su forma de hablar. Un maltratado social, un despreciado familiarmente y un cero ganador con las mujeres. Una mujer que atendía un hot line que de hot y de line no tenía nada, que estaba más desesperada por encontrar a alguien, sin distinguir raza ni sexo. Un hombre cualquiera que se presenta en la familia de su mujer y en su familia, contándonos costumbres tan nuestras y ejemplos de lo que todos en algún momento hemos debido pasar.

Un público que acompañó cada construcción, textos interesantes y personales pero que a la vez nos unen a todos en lo cotidiano. Una escena simple donde lo que resalta es el actor. Un final que conmueve por la sensibilidad con que el protagonista nos habla y se baja de esa línea de personificación para hablarnos de igual a igual.

Pablo Ruffa elige la familia, elige el amor y elige darnos un ejemplo de que se puede construir sin chabacanerías baratas. Rigotryl es un lindo momento para compartir con alguien querido.

Repone el año que viene donde el arte y las circunstancias lo encuentren disponible.

Winona.

"Rigotryl", un estado emocional
se presentó en TEATRO DEL CENTRO
los viernes de noviembre - 00.15hs
Repone el año que viene