Felices Fiestas!

Crecer es difícil.
Estos últimos días me he puesto melancólica recordando seres que ya no están, pensando en cosas que no tengo, mirando series viejas de mi adolescencia, notando cuantas cosas han cambiado. Supongo que serán las fechas, ¿no? Supongo también que a muchos les sucederá. Y las imágenes se proyectan sobre mis ojos como una pantalla de cine; una película que se repite una y otra vez…

Pero este año… este año ha sido de puro crecimiento. Quizás sea el cierre de un ciclo, quizás el cambio de decenio que se aproxima, no lo sé. Pero este año, más allá de esta melancolía temporaria, debo agradecer y mucho.

Conocí gente maravillosa que no solo piensa como yo, sigo que no se detiene, que investiga, que avanza, que proyecta; gente que hace arte, vive en el arte, siente arte y en pos de eso construye. Gente que une gente, que ayuda, que integra, gente que escucha, que crece y te hace crecer a su lado. Amigos que no lo eran y hoy lo son, gente que elijo con mi corazón y espero me elijan.

Vi muchísimo teatro, conociendo nuevas formas de expresión, nuevas maneras y contextos. Me embarqué en proyectos personales de crecimiento, como el volver a estudiar luego de años. Logré subirme nuevamente a un escenario sintiendo que no hay lugar en el mundo en donde yo sea más yo, paradójicamente. Me llamaron de proyectos haciéndome sentir que el interés es mutuo en el crear y en el crecer y espero poder responder a la altura de las circunstancias ante tal hecho de confianza.

Y lo mejor… es que volví a sentir y no dejé de sentir. El hecho de ver a mi hijo crecer día a día es el motor que me impulsa a todo, que me da las energías que tanta gente envidia y remarca y que a mi me hace sonreír porque no sé cómo ni donde, pero las tengo… Y su sonrisa me ilumina y me hace llorar y me deslumbra día a día y eso provoca que solo quiera hacer más y mejor y que pueda obtener las fuerzas para seguir creciendo.

Y sé que no lo hubiera hecho sin vos. Que desde algún lugar, a través de algunas palabras, hechos o gestos hiciste que en mí algo cambiara, algo me movilizara o me hiciera pensar. Desde aquí, desde mi blog, proyecto más que personal e íntimo, que armé y armo con el corazón compartiendo lo que siento y cómo lo siento, abriendo de a poco un espacio para el ida y vuelta con el otro, con vos nuevamente.

Y quiero que esto crezca, y el espacio se amplíe, y las ganas y los tiempos se agranden y las notas sean más y mejores junto a más personajes… Y no lo voy a poder hacer si no estás del otro lado, apoyándome, a tu forma, desde tu lugar, para poder encontrar en este espacio un lugar para compartir.

Te espero en el 2010 con mucho arte para respirar y con una sonrisa amplia de quien logra más no sea acercarse un poquito al otro, esta vez, mediante este medio.

Felices Fiestas.

Winona.